Esta sería la mayor contracción en México desde 1932, tras la Gran Depresión mundial, indica el ente emisor en su último reporte.
La caída se extendería en 2021, de acuerdo con alguno de los escenarios que estableció el banco ante lo incierto del comportamiento de la pandemia y de los mercados financieros.
El Producto Interno Bruto (PIB) se ubicará en 2020 entre -4,1 y -8,8 por ciento, lo cual contrasta con el crecimiento proyectado de 0,5 a 1,5 por ciento, explicó Alejandro Díaz de León, gobernador del banco central al presentar el Informe Trimestral enero-marzo 2020.
Para el próximo año, dijo, la previsión fue ajustada a una contracción de hasta -0.5 por ciento, que se compara con un crecimiento de 1,1 a 2,1 por ciento proyectado anteriormente.
La actualización a la baja es la quinta que aplica el instituto central al pronóstico de crecimiento para 2020.
Cabe señalar que estas expectativas sirven al mercado para estimar el ritmo al que el Banco de México podría recortar su tasa de interés durante los próximos meses.
Con base a los escenarios del banco emisor, se presenta un rango amplio de posibles resultados negativos para la población económicamente activa en 2020 que va de una pérdida de puestos entre 800 mil y un millón 400 mil para lo que resta de año, en tanto que para 2021 se podría presentar una variación de 200 mil a 400 mil empleos menos.
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