En entrevista concedida al diario El Tiempo, Molano eludió dar respuestas directas relacionadas con el asesinato de líderes sociales y defensores de los derechos humanos, de los que reconoció solo 33 muertes durante el 2021.
Sin embargo, el Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (Indepaz) confirmó el asesinato de 310 de estos actores sociales durante el pasado año, mientras instancias internacionales como la Organización de Naciones Unidas señala que la situación es producto de la inefectividad del Estado y los uniformados.
Molano también se refirió a la desconfianza de los colombianos hacia los militares y policías a partir de los actos de represión violentas registrados durante 2021.
‘(…)buscaremos que se cumplan con esos principios de transparencia, que se dé fortaleza al cumplimiento de los protocolos de derechos humanos y derecho internacional humanitario’, dijo sobre el tema, aunque no se refirió a la decena de muertos provocados por el accionar de las fuerzas del orden durante el pasado año.
El ministro de Defensa, afiliado al partido de derecha Centro Democrático, al que también pertenece el presidente, Iván Duque, continuó con la línea de responsabilizar a los grupos armados ilegales y al narcotráfico de la violencia en Colombia, y confirmó que la lucha contra estos es la prioridad de su cartera.
‘(…) ellos son los responsables de las extorsiones, el narcotráfico, la deforestación y la minería ilegal. Su desmantelamiento es vital y será una prioridad’, comentó.
Muchos de estos grupos armados, en especial los carteles de la droga y paramilitares, se hicieron con el control de importantes regiones rurales tras el Acuerdo de Paz de 2016, mediante el cual fueron desmovilizadas las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, hasta entonces el grupo guerrillero más importante del país.
Molano asumió la víspera la jefatura del Ministerio de Defensa a una semana de la muerte del anterior titular Carlos Holmes, ocasionada por complicaciones relacionadas con la Covid-19.
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