Como ha transcurrido todo este año de pandemia, tampoco usó el cubrebocas para hablar y no se le noto sofocado después de 14 días de reclusión en su pequeño apartamento en el Palacio, donde transcurrió su hospitalización bajo el cuidado de un equipo multidisciplinario encabezado por el doctor Jorge Alcocer, secretario de Salud.
En sus primeras palabras agradeció al pueblo mexicano la preocupación y solidaridad expresada por su salud y los ruegos de que se cuidara.
Hizo lo mismo con los presidentes y otros dirigentes de numerosos países que le enviaron mensajes de aliento, así como a los médicos que lo asistieron en estos 14 días.
En todo ese tiempo fue sustituido en las reuniones matutinas por la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez, quien también dirigió los acostumbrados encuentros diarios a las seis de la mañana en Palacio con el equipo de seguridad ciudadana y de salud, los cuales no se detuvieron ni un solo día.
agp/lma