‘Mi principal condición para dejar el poder es la paz, el orden en el país, no acciones de protesta, no poner al país patas arriba, que las personas puedan expresar su opinión dentro de la ley’, subrayó, al intervenir ante la VI Asamblea Popular, reunida este jueves y mañana.
El mandatario aclaró que su segunda condición es que de llegar al poder la oposición en su contra, debe garantizar la seguridad de sus partidarios. ‘Ni un pelo de ustedes puede caer’, advirtió.
En la reunión participan más de dos mil 700 delegados y se discuten los ejes del desarrollo socio-económico del país para el próximo lustro, informó la agencia rusa de noticias TASS.
En su intervención de cuatro horas, el gobernante dijo que está a favor de una reforma constitucional, pero también de que el país siga siendo una república presidencial.
Significó que por el momento no tiene intención de entregar la nación ‘a nadie’, en referencia a los intentos de sacarlo del cargo por parte de sectores de la oposición.
El líder belarruso reconoció que una nueva generación debe llegar al poder y esto debe ser determinado por el pueblo en elecciones justas y abiertas.
A la vez, señaló que la reforma constitucional se discutirá en las plataformas de diálogo durante este año. Prometió que la nueva Constitución del país estará lista para finales de 2021 y se someterá a un referendo en 2022.
‘Durante este año el proyecto de Constitución estará listo y será discutido por la sociedad. Y a principios del año que viene se votará en un referendo’, indicó.
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