Naciones Unidas prevé que en 2021 el país enfrentará desafíos humanitarios más drásticos, ya que se pronostican condiciones de sequía por probabilidades de lluvias por debajo de los niveles promedios asociadas con el fenómeno meteorológico de La Niña, así como el impacto de la Covid-19 en la economía.
Múltiples crisis, incluidas situaciones climáticas erráticas, conflictos prolongados, enfermedades y una plaga masiva de langostas del desierto, llevaron al borde de la supervivencia a millones de niños, mujeres y hombres en Somalia’, advirtió el coordinador humanitario de la ONU para este Estado, Adam Abdelmoula.
‘Como resultado, esperamos que las necesidades humanitarias crezcan durante 2021. Nuestro apoyo para garantizar la disponibilidad y el acceso a servicios básicos como alimentos, refugio y servicios de salud es vital’, subrayó Abdelmoula, al lanzar el Plan de Respuesta Humanitaria para Somalia de 2021.
Ese programa hace énfasis en que ‘las necesidades humanitarias en Somalia no se pueden abordar sólo con la entrega de asistencia vital’, pues existen oportunidades para contribuir a ‘fortalecer la resiliencia de los somalíes’, expresó la ministra somalí de Asuntos Humanitarios y Gestión de Desastres, Khadija Mohamed Diriye.
‘Por lo tanto, pedimos a los donantes que también den prioridad a los programas que abordan los desafíos estructurales y crónicos del desarrollo en Somalia, incluida, entre otras, la protección de mujeres y niñas’, añadió la titular.
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