Por 364 votos a favor, 130 en contra y tres abstenciones, los legisladores determinaron que continuara detenido Silveira, miembro del Partido Social Liberal, la otrora organización política del presidente Jair Bolsonaro (ahora sin formación).
Durante la videoconferencia de la asamblea, el político pidió disculpas por sus ‘palabras impropias’, al alegar que cualquiera puede exagerar y que está arrepentido.
Tras la votación, el titular de la Cámara Baja, Arthur Lira, manifestó que la audiencia para el sufragio resultó un sacrificio para todos los congresistas y no dejó un clima de tranquilidad ni de felicidad.
El juez Alexandre de Moraes, del Supremo Tribunal Federal, ordenó el 16 de febrero detener al integrante de la base aliada de Bolsonaro, capturado por la Policía Federal en la ciudad de Petrópolis, zona serrana de Río de Janeiro.
Según De Moraes, ‘las manifestaciones del parlamentario, por redes sociales, se revelan gravísimas, pues no solo atacan la honorabilidad y constituyen amenaza ilegal a la seguridad de los magistrados del Supremo Tribunal Federal, sino que también se revisten de clara intención de impedir el ejercicio de la judicatura’.
En el audiovisual, Silveira también defendió la dictadura militar (1964-1985) y comentó que los magistrados del juzgado superior merecían una paliza. ‘No tienen carácter, escrúpulos ni moral’, apuntó.
De acuerdo con la legislación, los diputados y senadores son inviolables, civil y penalmente, por cualquiera de sus opiniones, palabras y votos, y solo pueden ser detenidos in fraganti por un delito no susceptible de fianza.
El 27 de enero a Silveira se le prohibió embarcar en un vuelo de la línea aérea Gol de Guarulhos (Sao Paulo) a Brasilia por negarse a llevar máscara protectora contra la Covid-19.
jf/ocs