El primero de ellos, Sergio Rojas, bribri del clan Uniwak de Salitre, fundador y líder de Frenapi, fue asesinado el 19 de marzo de 2019 en su casa en la comunidad Yeri, territorio indígena de Salitre, en el cantón de Buenos Aires, en la provincia de Puntarenas.
El otro es Jerhy Rivera, recuperante indígena bröran, asesinado el 24 de febrero de 2020. Ambos crímenes continúan impunes, pese a la insistencia por justicia pronta y cumplida de las comunidades originarias y organizaciones internacionales.
‘Celebrar el Bicentenario significaría invisibilizar a nuestros Pueblos Indígenas y legitimar la violencia institucionalizada y el despojo histórico. En su lugar proponemos continuar la senda abierta de la lucha por nuestra autonomía, hasta el final’, precisa el acuerdo del Frenapi, adoptado en su Primera Asamblea de 2021.
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