Tal alarmante cifra afloró en una encuesta realizada por el Sindicato de Profesores de Enseñanza Oficial del Estado de Sao Paulo (Apeoesp).
El gobierno de Joao Doria, que prometió divulgar los datos semanales sobre contagios y sospechosos por el patógeno en los planteles públicos, se negó a divulgarlos durante los últimos nueve días y alegó que prepara un nuevo Panel de Seguimiento.
Al hacerlo, se limitó a informar que la semana pasada se cerraron cinco establecimientos docentes por la contaminación.
El 16 de febrero, el secretario estadual de Educación, Rossieli Soares, notificó que se revalidaron 741 infectados por la Covid-19 en los colegios entre estudiantes y maestros.
De ellos, 456 se ubicaron en la red estadual, 14 en la municipal y 271 en la privada. Otros mil 133 casos sospechosos estaban siendo analizados.
Las estadísticas corresponden al periodo comprendido entre el 2 de enero y el 13 de febrero.
Rossieli apuntó además que los datos se publicarían cada martes, lo cual no ocurrió esta semana.
Para la presidenta del Apeoesp, Maria Izabel Azevedo Noronha, la administración de Doria oculta datos porque hay una explosión de casos en las escuelas.
‘Ya hay más de un millar de infecciones por la Covid-19. Este es el resultado del desprecio del gobernador y de la Secretaría de Educación por la vida de los maestros, empleados, estudiantes y sus familias’, señaló.
Reiteró que, de hecho, ‘se desecha la vida de todos, porque mantener las actividades en las escuelas es estimular la circulación del virus y hacer que la pandemia sea aún más fuerte’.
Las medidas de control durante la noche son el marketing (mercadeo) más puro teniendo en cuenta el panorama actual, aseveró Azevedo.
Pese a afirmar que la vuelta a aulas en medio de la pandemia resulta segura, el gobierno paulista restringió el acceso al Sistema de Información y Seguimiento Educativo de Covid-19 (Simed) y dejó sin transparencia la evaluación de la reanudación de las actividades.
Epicentro de la pandemia de Covid-19 en el país, Sao Paulo acumula 58 mil 873 muertes y dos millones 14 mil 529 contaminados, mientras en general Brasil contabiliza hasta la fecha 251 mil 498 pérdidas humanas y 10 millones 390 mil 461 infectados.
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