En un escueto mensaje en la red social Twitter, el gobernante también prometió medidas drásticas para combatir el secuestro y el crimen organizado.
Varios medios de prensa han denunciado las condiciones en las cuales permanecen las víctimas, dos días después de su liberación de Gran Ravine, una zona bajo la influencia de pandillas armadas.
‘Los tres señores pasaron dos noches en la Dirección Central de la Policía Judicial en condiciones deplorables en una sala de entrenamiento en sillas, sin comida, sin posibilidad de nada, sin explicaciones’, criticaron directivos de Muska Fils, la productora para la cual trabajan los dos técnicos.
Los funcionarios también aseguraron que no mantuvieron contacto con los secuestradores, sino que fueron directamente las autoridades haitianas.
Los hermanos Michael Enrique y Antonio Gerer Campusano Félix, junto al intérprete haitiano Junior Albert Augusma, fueron raptados el 20 de febrero en la entrada sur de esta capital, mientras viajaban en un convoy de regreso de la ciudad sureña de Jacmel.
Sus captores pidieron dos millones de dólares por su rescate, pero hasta el momento se desconoce las condiciones de la liberación, o si se pagó la alta suma.
El viernes en la noche, el presidente dominicano Luis Abinader anunció en las redes sociales que los técnicos estaban en manos de las autoridades, y aseguró que dio instrucciones ‘para que sean trasladados a la embajada dominicana’.
En Haití se multiplicaron los secuestros en el último año, y de acuerdo con organizaciones de derechos humanos, al menos mil personas fueron víctimas en 2020.
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