Hasta el cierre del fin de semana solo se agendaron por vías telefónicas y de internet establecidas para vacunarse 41 mil 297 personas de los 140 mil convocados entre educadores, policías, bomberos, militares, aduaneros y personal del Instituto de la Niñez y Adolescencia.
El acceso a la vacuna es voluntaria y precedida por la firma personal de un consentimiento y un tácito compromiso de que en caso de daño reclamar solo en tribunales uruguayos, lo que blinda a los laboratorios abastecedores de litigios.
Fuentes mediáticas indicaron aquí que se trata de una de las cláusulas confidenciales que la firma estadounidense Pfizer impone a países clientes, y de la cual Uruguay recibirá dosis a partir del 8 de marzo, según anunció el presidente Luis Lacalle Pou.
Presentada esta vacuna como presuntamente superior por el mismo mandatario, decidió que se le destinara al personal médico en la fase siguiente de inmunización.
Pero el Ministerio de Salud Pública determinó ayer que si Pfizer tarda más de 15 días en cumplir con el abastecimiento, se aplicará el inoculador chino del que se espera con certeza un millón 558 mil unidades.
A su vez el ministro de la cartera Daniel Salinas declaró ‘buena disposición’ para comprar la vacuna rusa Sputnik V por sus cualidades y resultados, meses después que el gobierno desautorizó un encargo de la mutualista Casmu, del sindicato médico.
En tanto el Sistema Nacional de Emergencia informó que en la última jornada se confirmaron 633 casos nuevos de Covid-19 en cinco mil 540 análisis para una positividad del 12 por ciento y siete mil 447 enfermos activos
Cinco fallecimientos más llevaron a 608 las pérdidas de vida a lo largo de casi un año de pandemia, mientras el departamento Río Negro se encuentra a punto de convertirse en el sexto territorio en zona roja de riesgo junto a Rivera, Tacuarembó, Durazno, Cerro Largo y Montevideo.
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