Al encabezar un acto en la otrora Escuela de Mécanica de la Armada, uno de los grandes centros clandestinos en esos tristes años, el mandatario señaló que aquel 24 de marzo comenzó en el país la mayor tragedia de la sociedad, que obligó a miles de personas a exiliarse y terminó con la vida de cientos de trabajadores.
Ese día, dijo, se produjo un quiebre moral que nunca debemos de olvidar ni dejar de repudiar.
Fernández recordó a los miles de trabajadores que fueron parte del movimiento obrero y dejaron su vida en esa lucha, personas que luchaban por una sociedad más igualitaria y justa, con mejores condiciones de vida.
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‘Muchos quieren que el olvido nos gane y un día dejemos de recordar el pasado. Mirar el pasado tiene que ver con el modo como queremos construir el futuro’, sostuvo en otro momento de la ceremonia.
A la velada asistieron referentes de derechos humanos, víctimas de la dictadura e hijos apropiados y recuperados por las Madres y Abuelas de Plaza de Mayo.
De otra parte señaló que los que hoy no están presentes lucharon por una sociedad mejor y exhortó a recordar cada 24 de marzo ‘el horror que vivimos’ al tiempo que enfatizó que como argentino que es, no puede olvidar lo que pasó en esa fecha. No fue una guerra, fue terrorismo de estado, dijo.
En otro momento, expresó el amor y respeto que siente por las Madres y Abuelas de Plaza de Mayo a quienes vio en esos años de dictadura (1976-1983) tener el coraje que la inmensa mayoría de los argentinos no tuvieron, y expresó que en cada una de ellas hay un ejemplo de vida y un modelo a seguir.
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Al tomar la palabra en el encuentro, la referente de Madres de Plaza de Mayo-Línea Fundadora, Taty Almeida, indicó que por primera vez un presidente recuerda a los trabajadores detenidos y desaparecidos durante la dictadura y llamó a los jóvenes a seguir luchando por justicia y verdad.
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