La temporada que precede al crudo invierno (21 de junio a 20 de septiembre), deja atrás un verano muy caluroso, aunque trae consigo mucha preocupación, sobre todo de las autoridades por los cambios de temperaturas que normalmente provocan gripes y refriados.
En esta capital los porteños recibieron el otoño bajo lluvia y, según el Servicio Meteorológico Nacional, se prevé este domingo cielo parcialmente nublado, vientos leves a moderados del sudeste y una temperatura de entre 15 y 22 grados Celsius en la llamada Área Metropolitana de Buenos Aires.
El inicio de esta estación se produce en el momento del equinoccio, que marca el comienzo de la primavera en el hemisferio norte.
Como es conocido, en los últimos tiempos este fenómeno ocurre en distintas horas del 20 de marzo y estiman expertos que así seguirá siendo al menos el 2025. En el hemisferio sur, el otoño durará 92 días y 18 horas antes de la llegada del invierno.
Aunque la pandemia sigue golpeando y el Gobierno argentino toma recaudo para evitar un rebrote más fuerte, como ha sucedido en otras partes, algunos convidan a disfrutar de la estación en lugares hermosos de esta geografía austral.
Desde el sitio www.voydeviaje.com.ar proponen, por ejemplo, cinco destinos para enamorarse del otoño, uno de ellos las hermosas Cataratas de Iguazú, una de las siete maravillas naturales del mundo.
Aunque se pueden visitar todo el año, es recomendable viajar en esta época ya que en abril termina la temporada de lluvias y puede aprovecharse más el paseo.
Mencionan entre otros lugares para disfrutar a la Traslasierra, en el Valle de igual nombre, provincia de Córdoba, que en la temporada otoñal se tiñe de naranja y sus paisajes son aún más espectaculares.
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