Durante unas declaraciones desde la Casa Blanca, el mandatario recalcó que no es necesario esperar ni un minuto ni mucho menos una hora para tomar medidas de sentido común que salvarán vidas en el futuro.
Luego del tiroteo de la víspera en un supermercado de Boulder, Colorado, que dejó 10 víctimas mortales, el gobernante demócrata insistió en la necesidad de abordar las lagunas en el sistema de verificación de antecedentes para quienes portan armas de fuego.
Por su parte, el líder de la mayoría en la Cámara alta, Charles Schumer, prometió impulsar acciones que aborden la violencia armada.
En ese sentido, dijo, urge avanzar en la legislación para ayudar a controlar la epidemia y la violencia con armas.
También el senador Dick Durbin abogó por una reforma sobre el acceso a las armas, incluidas verificaciones de antecedentes más estrictas para la venta de esos dispositivos.
Para el senador de Colorado Michael Bennet, los estadounidenses deben ‘revisitar una conversación nacional sobre la violencia con armas que no se reduzca a lo partidario’.
Recientemente, la Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobó dos proyectos de ley sobre estos temas, que aún están pendientes de análisis por parte del Senado.
Pero este tipo de iniciativas históricamente encuentran fuertes obstáculos entre los republicanos de la Cámara alta.
El tiroteo de la víspera en Colorado se produce menos de una semana después de que un individuo de 21 años asesinara a ocho personas, varias de origen asiático, al abrir fuego en tres salones de masajes de Atlanta, Georgia.
Ambos hechos avivan el debate sobre la necesidad de una legislación más fuerte para el control de armas en Estados Unidos.
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