Moon fue vacunado en un centro de salud pública en el central distrito de Jongno de Seúl, donde se dispuso la inmunización de los delegados que se preparan para viajar al extranjero a participar en la reunión del G7.
No hay problema en absoluto, declaró el jefe de Estado al recibir la dosis, en respuesta a las preocupaciones de la población sobre la seguridad de la vacuna producida por la farmacéutica británica AstraZeneca.
La seguridad y eficacia de la vacuna de AstraZeneca ha generado controversia en Corea, donde primero se suspendió la inoculación a personas de 65 años o más, citando datos insuficientes sobre su eficacia para ese grupo de edad.
Más tarde, se decidió usar el fármaco para los ancianos, pero luego se reportaron casos sospechosos de formación de coágulos de sangre tras recibir las inyecciones.
No obstante, las autoridades sanitarias decidieron seguir adelante con el programa de vacunación según lo planeado, diciendo que no había una relación causal entre el desarrollo de los coágulos de sangre y la vacuna.
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