En palabras del propio canciller, Felipe Solá, era formalizar algo que ya venía ocurriendo desde el 10 de diciembre de 2019, cuando asumieron la gestión y desde un primer momento no participaron en las reuniones convocadas por ese espacio ni firmaron ninguna declaración.
Con claros hilos conductores desde Washington, la Alianza fue creada en la capital de Perú con el respaldo de 14 países, incluyendo a Argentina bajo la presidencia de Mauricio Macri, criticando desde el inicio la situación política y de derechos humanos en Venezuela.
La víspera, el Gobierno de esta nación austral dejó por sentada su salida al señalar que las acciones que ha venido impulsando en el plano internacional, buscando aislar al Gobierno de Venezuela y a sus representantes, no han conducido a nada.
Asimismo, añadió que la participación de un sector de la oposición venezolana como un integrante más del Grupo de Lima ha llevado a que se adoptaran posiciones ‘que nuestro Gobierno no ha podido ni puede acompañar’.
En ese mismo comunicado, el Gobierno manifestó que, en medio de la pandemia, las sanciones y bloqueos impuestos a Venezuela y a sus autoridades, así como los intentos de desestabilización ocurridos en 2020, no han hecho más que agravar la situación de su población.
El senador y excanciller Jorge Taiana, quien afirmó que su país nunca debió haber pertenecido al Grupo Lima por su larga tradición de no injerencia en asuntos internos, calificó de excelente la decisión.
‘Es una buena noticia que Argentina abandone el Grupo de Lima al que nunca debió pertenecer, por tener este grupo un carácter intervencionista, contrario a la solución pacifica de las controversias y a la paz y la no intervención’, expresó en un mensaje en su cuenta en twitter.
Por su parte, el destacado politólogo Atilio Borón, señaló que el país tardó en abandonar lo que calificó ‘el invento de Donald Trump, Iván Duque, Sebastián Piñera y Macri’, al cual después se sumó Jair Bolsonaro, para agredir a Venezuela’. Ahora, dijo, corresponde enviar un embajador a Venezuela.
Asimismo, consideró preciso que haga lo propio el gobierno de México, ‘que nadie entiende por qué todavía sigue en esa cueva de narcogobernantes’.
A juicio del diputado nacional Leopoldo Moreau, con esta decisión ‘por fin empieza a debilitarse la opción belicista e intervencionista para resolver la situación de Venezuela’ y se abre el camino al diálogo y la paz.
Mientras ciertos sectores de la oposición argentina salieron a criticar y rechazar la postura del Gobierno, y también varias voces desde Estados Unidos, fueron muchos más los que la aplauden.
El Grupo de Puebla, la alianza de la que forman parte destacadas figuras políticas de la región, destacó que la reacción de Argentina es un compromiso con la estabilidad de la región y las acciones contra Venezuela solo han agravado la situación de los más vulnerables.
La mejor manera de ayudar es facilitar un diálogo inclusivo que no favorezca ningún sector, señaló ese bloque, integrado por presidentes, exmandatarios, excancilleres, políticos, de más de 15 naciones.
En un artículo difundido en el Diario Contexto, el profesor, periodista y escritor Héctor Bernardo explicó que desde que el Frente de Todos, que llevó a la presidencia a Alberto Fernández, triunfó en las elecciones, diversos sectores de su espacio político reclamaban la salida del país del Grupo de Lima.
Recordó además que el denominado Grupo había sido creado en agosto de 2017 por países con gobiernos de derecha alineados con la política exterior que Estados Unidos desarrollaba contra Venezuela, entre esos gobiernos se encontraba el de Mauricio Macri, remarcó.
‘La política exterior norteamericana había fracasado al intentar aplicar sanciones contra el gobierno de Nicolás Maduro en la Organización de Estados Americanos. Las acciones del secretario general de ese organismo, el uruguayo Luis Almagro, alfil de las políticas del Departamento de Estado, no habían rendido sus frutos’, dijo.
Por ese motivo, recordó, Estados Unidos impulsó la creación del Grupo de Lima con el único fin de agredir diplomáticamente a Venezuela.
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