Radev declaró que su voto era por evitar un desmembramiento de este pequeño país balcánico, donde la pandemia de Covid-19 azota con fuerza, indicó la televisión capitalina.
Estoy por una Bulgaria libre, justa y próspera. También voté contra la impunidad y la corrupción, afirmó el mandatario poco después de ejercer su derecho constitucional.
Aunque con dificultad, los búlgaros toman en sus manos el destino del país y dan el primer paso para una Bulgaria normal, donde impere la ley y las reglas, declaró el jefe de Estado, un independiente con apoyo del Partido Socialista Búlgaro.
De igual forma, Radev, excomandante de la Fuerza Aérea, llamó a todos los ciudadanos a participar en los comicios, donde se definen los 240 diputados de la Asamblea Nacional (parlamento unicameral), para elegir una mayoría que forme gobierno.
El presidente búlgaro consideró que, en caso de un pronunciado abstencionismo, esta nación puede ser enviada a realizar una nueva prueba de democracia.
De acuerdo con el servicio de estudios de opinión Trend, en las primeras tres horas de votación apenas el 8,3 por ciento de los empadronados asistió a las urnas, un 0,24 por ciento para esa hora por debajo de los legislativos adelantados de 2017.
La formación de Borisov, el partido Ciudadanos por el Desarrollo Europeo de Bulgaria, contaba ayer en los sondeos con el 28 por ciento del respaldo, por encima del Partido Socialista, con 20.
Medios de prensa llaman la atención que pese a la crítica situación epidemiológica en el país, a causa del avance de la pandemia de Covid-19, el Gobierno decidió el pasado jueves levantar restricciones impuestas apenas el 22 de marzo último.
Bulgaria registra más de nueve mil 800 casos activos y acumula unos ocho mil 300 fallecidos con una población de siete millones 245 mil 677 habitantes.
Otro favorecido con los estudios de opinión fue la recién formada organización ‘Existe tal pueblo’, del activista televisivo Slavi Trifonov, con 13 por ciento de preferencia.
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