‘Lo que está en juego no son decisiones políticas, sino el cumplimiento de la Constitución’, afirmó el ministro Luís Barroso.
Al emitir su voto, argumentó discutir ‘el derecho de las minorías parlamentarias a supervisar el poder público, en el caso concreto, ante una pandemia que consumió 360 mil vidas solo en Brasil, con perspectivas de que a corto plazo lleguemos a los 500 mil muertos’.
Con tal votación, el pleno de la corte ratificó el requerimiento del ministro, quien determinó la formación del CPI por el Senado. El juez Marco Aurélio Mello votó en contra.
Según Barroso, el funcionamiento del ‘CPI de Covid’ (presencial o virtual) dependerá de la propia Cámara legislativa.
‘No le corresponde al Senado decidir si se instala o cuándo va a funcionar, sino cómo va a proceder’, señaló.
Insistió en que no se hacen distinciones políticas. ‘Las normas constitucionales se aplican a todos. Aquí no se está haciendo una excepción. Es parte del juego democrático’, reiteró.
La creación de la CPI fue solicitada por el senador opositor Randolfe Rodrigues, quien argumentó que con ella se pretende ‘investigar las acciones y omisiones del Gobierno federal para enfrentar la pandemia en Brasil’.
Especialmente, agregó, ante ‘el deterioro de la salud en Amazonas con la falta de oxígeno para los pacientes hospitalizados en los primeros meses de 2021’.
Recientemente, el diputado federal y exministro de Salud Alexandre Padilha denunció al presidente Jair Bolsonaro por la práctica del genocidio, con la creación de un ‘corredor de la muerte’ que llevó al país a liderar el número diario de pérdidas de vida por Covid-19 en todo el mundo.
Los ministros del Supremo emitieron sus votos por adelantado para iniciar el análisis del caso en el que el juez Edson Fachin anuló las condenas del expresidente Luiz Inácio Lula da Silva, quien de esta forma recuperó sus derechos políticos.
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