Según Ahmed Hafez, portavoz de la cancillería, Shoukry insistió en la importancia de que todas las partes respeten los resultados del diálogo nacional, así como los derechos electorales en los plazos pactados.
Para preservar la unidad libia es necesario poner fin a cualquier injerencia extranjera no constructiva y asegurar la salida de los mercenarios, subrayó Shoukry.
Al mismo tiempo, agregó, el fortalecimiento de las instituciones nacionales garantizará la estabilidad y el desarrollo al que aspira el pueblo libio.
El enviado de la ONU, por su parte, aprovechó la reunión celebrada en la capital egipcia para informar al canciller anfitrión sobre los resultados de sus recientes contactos con los actores involucradas en la crisis libia.
Kubis agradeció los esfuerzos de El Cairo encaminados a apoyar la estabilidad en el país vecino y expresó además su deseo de mantener el ritmo de coordinación.
Durante el conflicto armado, Egipto respaldó a las autoridades del este de Libia, e impulsó iniciativas regionales para la consolidación de la paz como la Declaración de El Cairo (2020).
El presidente Abdel Fattah El-Sisi ofreció la asesoría egipcia al nuevo ejecutivo, electo el 10 de marzo último por el Foro de Diálogo Político, bajo el auspicio de la ONU.
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