Un día después de la reunión de dirigentes y representantes de las principales fuerzas de izquierda, Bayou lanzó la propuesta de la coalición como el camino para impedir que dentro de un año, el presidente Emmanuel Macron y la líder de la extrema derecha, Marine Le Pen, reediten el balotaje de 2017, hasta ahora el escenario más probable, según encuestas.
Al comparecer en el programa el Gran Jurado, de los medios RTL, Le Figaro y LCI, insistió en que es un ecologista quien puede unir, al margen de las diversas tendencias, en aras de hacer frente a la propuesta de Macron de ‘servir al mundo de las finanzas’ o a la de Le Pen, promotora de un ‘pasado fantasioso’.
El país necesita una candidatura ecologista, dijo Bayou, quien citó como argumentos una ley sobre el clima diezmada por los lobbies, la catástrofe agrícola por las gélidas temperaturas de abril y la pandemia de la Covid-19 y su devastador saldo.
Si bien los ambientalistas sacaron muy buenos resultados en las elecciones europeas de 2019 y en las municipales del año pasado, los sondeos otorgan una mejor posición para las presidenciales al aspirante por La Francia Insumisa, Jean-Luc Mélenchon, y a la alcaldesa socialista de París, Anne Hidalgo, ambos bien alejados de Macron y Le Pen.
De acuerdo con expertos, la izquierda francesa tiene de cara a la cita en las urnas de 2022 un potencial del 30 por ciento de votos, que en teoría sería suficiente para que su eventual candidato alcance la segunda vuelta.
La víspera, tras la reunión, el líder del Partido Socialista, Olivier Faure, mostró expectativas ante la posibilidad de lograr la candidatura unificada, pero muchas voces insisten en que a un año de los comicios no parece un escenario fuerte.
Por lo pronto, Mélenchon ya está en campaña y el secretario nacional del Partido Comunista Francés, Fabien Roussel, fue investido este mes como candidato, aún pendiente de confirmación por la militancia, mientras los ecologistas prevén sus primarias en septiembre.
Encuestas reflejan que hasta siete de cada 10 votantes no quisieran ver en 2022 la reedición del duelo entre Macron (no ha dicho todavía que buscará otros cinco años en el Palacio del Elíseo) y Le Pen, sin que en realidad el mismo esté en peligro, al menos de momento.
Tampoco la derecha tradicional representa una amenaza para un segundo enfrentamiento electoral Macron-Le Pen, con Xavier Bertrand como el mejor ubicado en los sondeos, con un 16 por ciento, el más cercano a los favoritos.
Valérie Peccresse, Laurent Wauquiez y Bruno Retailleau reciben suficientes intenciones de voto cada uno como para reiterar el adverso panorama de la derecha tradicional, a la que el actual presidente y la líder de Agrupación Nacional intentan escamotear sufragios.
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