Un total de 22 alumnos resultó raptado durante un ataque perpetrado el 20 de abril contra la Universidad Greenfield, cinco de ellos perecieron durante los últimos días y se recobraron sus cadáveres, según fuentes policiales.
Al líder de la banda le identifican como Sani Jalingo, quien amenazó con masacrar al resto de los rehenes si el Gobierno no paga un rescate de 100 millones de nairas (unos 220 mil euros) y le entrega 10 motocicletas a su grupo.
Asimismo Jalingo le exigió al gobernador de Kaduna, Nasir el Rufa el cumplimiento urgente de lo demandado y le conminó a tomar en serio la amenaza, toda vez que – afirmó- su banda se dispone a cumplirla, aunque el funcionario ya reiteró en varias ocasiones que mantendrá su política de no pagar rescate a criminales o grupos armados.
Según fuentes oficiales, la actual demanda es una cifra inferior a los 600 millones de nairas (alrededor de 1,3 millones de euros) exigidos como rescate en un primer momento y trascendió que los familiares de los cautivos entregaron el equivalente a 100 mil euros destinados a comprar comida a los rehenes.
En ese contexto, dos de los estudiantes cautivos pidieron al Gobierno y a sus padres tomar en serio la decisión de los malhechores, que ya diero muerte a otros.
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