Tal afirmación de la ministra al presentar en abril último un informe en el organismo multilateral con relación a las garantías de los firmantes del proceso de paz, generó una ola de críticas en el país, no solo de ese partido, otrora Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común, sino de diferentes agrupaciones políticas.
Blum dijo, al retractarse, que el gobierno de Iván Duque ‘no pretende asignar responsabilidad por los incumplimientos de las disidencias a los excombatientes que permanecen en la legalidad incluido al partido Comunes que está comprometido con su proceso de reincorporación política’.
Lozada aseguró que ese colectivo de oposición entiende, con esas palabras de la canciller, que el gobierno modifica esa interpretación errónea emitida ante el Consejo de Seguridad.
La rectificación tuvo lugar este miércoles durante un debate de la Comisión de paz del Senado realizado en esta nación suramericana.
El pasado mes, Blum señaló que ‘se equivocan los que quieren confundir a la comunidad internacional sobre los logros y avances alcanzados. Pero se equivocan aún más los que pretenden confundir a este Consejo de Seguridad sobre las realidades de mi país y la región’.
‘Cuando se analiza el cumplimiento del acuerdo, el informe no puede solamente referirse a las acciones del Gobierno como una de las partes firmantes. Debe considerarse la existencia de disidencias de FARC-EP como un incumplimiento, justamente, de la antigua guerrilla, convertida ahora en partido político’, agregó.
Lo cierto es que numerosas voces en este país advierten sobre las acciones del gobierno que ‘hacen trizas’ el Acuerdo de Paz firmado en 2016, tras casi cuatro años de diálogo en La Habana, Cuba, entre el gobierno de Juan Manuel Santos, en representación del Estado y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo (FARC-EP).
En una entrevista con Prensa Latina, el senador por Polo Democrático Iván Cepeda señaló que lo pactado fue un acuerdo inédito para Colombia y el mundo.
Sin embargo, dijo, la implementación es muy difícil porque hay sectores que quieren vivir en el pasado, seguir fomentando la guerra y el conflicto.
Se trata de sectores que han vivido de la guerra y de la violencia en Colombia, que han hecho de la violencia un sistema político y económico, aseveró el político de oposición.
La puesta en práctica del Acuerdo está amenazada no solo por intentos de evitar su refrendación, sino igualmente por los asesinatos sistemáticos de quienes en los territorios de conflicto buscan la implementación, y de los propios firmantes que dejaron las armas y pasaron a la vida civil, aseguró.
Lamentó que a los exguerrilleros y exguerrilleras se les persigue y además les asesinan a sus familias.
Persiste un incumplimiento sistemático de la administración de Iván Duque al promover el ataque al proceso en distintos momentos y de distintas formas, comentó.
El senador de Comunes Carlos Lozada expresó ayer que queda claro que los integrantes de su partido tienen responsabilidad y compromiso con la implementación del Acuerdo de Paz.
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