La firma de la legislación por parte DeSantis la transmitió en vivo la cadena Fox News, en un acto en el que quedaron excluídos los medios locales que planeaban cubrir la ceremonia.
Esta medida limitaría el voto ausente para los electores, un procedimiento que utiliza la mayoría de los condados de Florida, y requeriría que quienes deseen ejercer su derecho mediante esa posibilidad presenten nuevas solicitudes en cada ciclo electoral, en lugar de cada cuatro años.
El proyecto de ley requeriría que los votantes que deseen una boleta de voto ausente o que cambien su registro de partido presenten la licencia de conducir, un número de identificación estatal o los últimos cuatro dígitos de su Seguro Social junto con su solicitud.
También prohíbe al estado o cualquier condado de Florida celebrar acuerdos de consentimiento legal que cambiarían los procedimientos electorales, y prohíbe a los condados aceptar subvenciones o fondos privados para pagar los gastos relacionados con las elecciones.
Los republicanos argumentan que las medidas están destinadas a mejorar la confianza en las elecciones pero los demócratas se oponen unánimemente a las reformas de DeSantis y a otras similares avaladas por el gobernador de Georgia, Brian Porter Kemp (R), así como a las que se debaten en Texas y Arizona.
Tras los comicios del 3 de noviembre de 2020, en las que Joe Biden venció al aspirante a la reelección, Donald Trump, legisladores del partido rojo en Estados Unidos comenzaron a presentar proyectos destinados a limitar el acceso al voto a quienes tienden a apoyar a los demócratas.
A finales de marzo pasado Porter Kemp firmó una legislación que restringe el acceso al voto en el territorio, al introducir requisitos de identificación de votantes más rígidos para el sufragio en ausencia, entre otras disposiciones.
Mientras, en el Senado federal los republicanos tratan de detener el proyecto de ley Para el Pueblo (For The People), auspiciado por Biden y sus aliados, que proporcionaría protección nacional al voto por correo, al sufragio anticipado y al registro de votantes en el mismo día de las elecciones.
En los últimos meses, en Estados Unidos se introdujeron más de 250 proyectos de ley en 43 de los 50 estados, que restringen el acceso a las urnas y afectan a las minorías y a los votantes pobres.
mgt/rgh