Según el Instituto Nacional de Pesquisas Espaciales (INPE), tal cifra revela que hubo un aumento del 43 por ciento de la aniquilación en comparación con abril de 2020.
Una marca anterior para el mes se notificó en 2018, con 490 kilómetros de selva deforestados.
Tal cifra en abril constituye un segundo récord mensual consecutivo en el año.
En marzo fueron arrasados 367,6 kilómetros de floresta, un espacio 12,6 por ciento mayor que el arruinado en el mismo periodo de 2020.
De acuerdo con el INPE, que utiliza imágenes satelitales para sus informes, en los primeros cuatro meses de 2021 la deforestación en la Amazonia sumó mil 157 kilómetros cuadrados y disminuyó un cuatro por ciento respecto al año anterior.
Brasil enfrenta una intensa presión internacional para que frene la destrucción de la mayor selva tropical del mundo, la cual desempeña un papel clave en el cambio climático.
En una cumbre de líderes del clima, auspiciada el mes pasado por Estados Unidos, el presidente Jair Bolsonaro afirmó que su país está abierto a la cooperación internacional y prometió que alcanzará neutralidad climática en 2050.
‘Determiné que nuestra neutralidad climática en Brasil se alcanzará para 2050. Por lo tanto, lo adelanto en 10 años a lo previamente anunciado’, aseguró el mandatario.
El gobernante apuntó que ‘entre las medidas necesarias para lograrlo, destaco el compromiso de eliminar la deforestación ilegal para 2030 con la plena y pronta aplicación de nuestro código forestal’.
Al respecto, el Partido de los Trabajadores (PT) acusó al exmilitar de mentir de forma insolente en su discurso en ese foro.
‘Además de tener una política ecocida, Bolsonaro ahora miente al mundo’, afirmó el líder del PT en la Cámara de Diputados, Elvino Bohn Gass.
Calificó de gran mentira la breve alocución del excapitán del Ejército que habría determinado el fortalecimiento de los organismos ambientales, duplicando los recursos para las acciones y la aplicación de la ley.
Bohn Gass recordó, por ejemplo, que en poco más de dos años el Gobierno de Bolsonaro derogó o modificó 606 normas y ordenanzas, ‘destruyendo toda la base legal para la aplicación y castigo de los infractores’ ambientales.
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