Según los informes, piratas informáticos desconectaron ese sistema por completo y robaron más de 100 GB de información del Oleoducto Colonial, que transporta unos 2,5 millones de barriles por día.
La violación de los parámetros de ciberseguridad obligó a la empresa a cerrar cinco mil 500 millas de tuberías para garantizar que los piratas informáticos no pudieran acceder a su tecnología operativa, reporta el diario The Hill, en su sitio digital.
Además, añade ese medio, este incidente también ejerce presión sobre el presidente estadounidense, Joe Biden, para que apoye una mayor financiación e iniciativas en torno a la protección de los sistemas críticos contra los ciberataques, tema fuera de su propuesta de infraestructura inicial.
Los legisladores republicanos y demócratas piden ahora que se proporcionen fondos para apuntalar la seguridad informática y se apruebe una legislación estancada sobre ese tema, en tanto aumentan ese tipo de agresiones tecnológicas.
Según datos oficiales, esas amenazas se incrementan de manera constante en los últimos años, y durante 2020 justo en medio de la pandemia de la Covid-19, se dispararon a medida que se realizaba más trabajo de forma remota y en línea.
De acuerdo con analistas, Estados Unidos podría ver un aumento en los precios de la gasolina debido al ataque al oleoducto, que transporta alrededor del 45 por ciento del petróleo utilizado por los aviones en la costa este y corre entre Texas y Nueva York.
La compañía de ciberseguridad Check Point Research señala que los piratas informáticos intentan violar las compañías de servicios públicos estadounidenses 260 veces por semana en promedio.
Desde marzo anterior, detalla, hay un aumento del 50 por ciento en esos intentos y un incremento general desde el comienzo de 2020.
El vicepresidente de soluciones de seguridad energética en la compañía Fortress Information Security, Tobias Whitney, consideró que el incidente en el oleoducto fue ‘revelador’ para todos los sectores de infraestructura crítica.
A su juicio, esta es una llamada de atención para el resto de todas las industrias y hay que tomar precauciones al respecto.
El CSC, grupo fundado por el Congreso norteamericano y compuesto por legisladores, funcionarios y líderes de la industria, publicó un informe el año pasado que destaca amenazas cibernéticas a la infraestructura crítica y describe recomendaciones.
Cualquier ataque cibernético fuerte a la infraestructura crítica y el sistema económico de la nación crearía caos y daños duraderos, advierte esa agrupación.
Tras el incidente en el Oleoducto Colonial, Estados Unidos decretó estado de emergencia regional con el fin de facilitar el transporte del combustible por otros medios, principalmente por carreteras.
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