Según argumentó Unicef UK, el gobierno británico contrató 347 millones de dosis para vacunar a 66,7 millones de habitantes que representan menos del uno por ciento de la población mundial.
Después que todos los adultos del Reino Unido se vacunen y los grupos de riesgos reciban una reactivación quedarán dosis suficientes para inmunizar totalmente a 50 millones de personas en otros países, afirmó la organización en un comunicado.
Unicef UK alertó además que a menos que los países más ricos del mundo comiencen a compartir sus excedentes de vacunas con las naciones pobres, nadie estará a salvo de la enfermedad provocada por el coronavirus SARS-CoV-2 ni de sus variantes.
Para ponerlo de forma clara, la donación de las dosis sobrantes es una cuestión de vida o muerte, y es por eso que necesitamos que el gobierno británico cumpla cuanto antes su promesa de compartirlas si queremos acabar con esta pandemia, recalcó Joanna Rea, directora de promoción de la institución caritativa.
En opinión de Rea, el Reino Unido debe aprovechar su presidencia pro tempore del Grupo de los Siete, que en total, dijo, acaparó un tercio del suministro mundial de vacunas contra la Covid-19, para exhortar al resto de los líderes a donar sus excedentes.
El gobierno británico prometió donar a través de la iniciativa Covax creada por la Organización Mundial de la Salud para un acceso equitativo y asequible a las vacunas, las dosis que le sobren después que concluya la campaña de vacunación nacional iniciada en diciembre pasado,
Más de 35,7 millones de personas en el Reino Unido ya recibieron al menos una dosis de AstraZeneca/Oxford, Pfizer/BioNTech o Moderna, que son los tres medicamentos autorizados hasta el momento por la agencia reguladora británica.
El plan de las autoridades es que para finales de julio toda la población adulta del país, calculada en unos 53 millones, haya tenido la oportunidad de inmunizarse contra la Covid-19.
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