Tal retroceso resulta menor al estimado por el mercado financiero.
Respecto a marzo de 2020, la actividad económica tuvo en el tercer mes del año un avance de 6,26 por ciento, sin ajuste estacional por tratarse de etapas similares.
Se trata del primer desplome tras 10 meses de máximos consecutivos.
En el acumulado de 12 meses, el IBC-Br tiene una caída del 3,37 por ciento.
Marzo estuvo marcado por el avance de la segunda oleada de la Covid-19 en Brasil. Al igual que el año pasado, varios estados y municipios restringieron la actividad económica para reducir el movimiento de personas y, en consecuencia, el número de casos por la dolencia.
El mercado considera el indicador del Banco Central como una anticipación del resultado del Producto Interno Bruto (PIB).
La financiera lo publica mensualmente, mientras que el estatal Instituto Brasileño de Geografía y Estadística lo hace cada tres meses.
El IBC-Br sirve de base para que los inversores y las empresas adopten medidas a corto plazo. Sin embargo, no refleja necesariamente el resultado anual del PIB y a veces es muy diferente.
Tal indicador del Banco Central tiene en cuenta la trayectoria de las variables consideradas como buenos indicadores del comportamiento de los sectores de la economía (agricultura y ganadería, industria y servicios).
El PIB se contrajo 4,1 por ciento en 2020, según datos divulgados por el IBGE a inicios de marzo.
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