‘Haz tu parte también: para contrarrestar la presencia de residuos que ves en las playas y que terminan en el mar, cada una de tus acciones diarias es importante y puede marcar la diferencia’, es el lema de la campaña para limpiar las costas y playas de la península, pero también las orillas del Mediterráneo.
Con el apoyo de socios como Novamont y Sammontana, Legambiente tiene programada más de 60 iniciativas en 15 regiones italianas, todas organizadas bajo estricto cumplimiento de las medidas antiCovid, según informó la institución.
Está prevista la participación de voluntarios de todas las edades, familias y grupos escolares, administraciones municipales y empresas.
Casi un centenar de iniciativas similares están planificadas también en otros 16 países mediterráneos, como Argelia, Croacia, Chipre, Egipto, Francia, Grecia, Malta, Mónaco, España y Turquía, que involucrarán a 85 asociaciones, encabezada por Clean up the Med, la versión mediterránea de Playas y fondos marinos limpios.
El llamado de la organización ambientalista desde su página Legambiente.it insta a ‘defender nuestro mar’ y explica que ‘la contaminación destruye ecosistemas, amenaza a la fauna marina y corre el riesgo de asfixiar para siempre uno de los mayores activos que tenemos, nuestro planeta azul’.
Sostiene, además, en su convocatoria que, según estimaciones, cada año entre ocho y 12 millones de toneladas de desechos terminan en los mares y océanos del mundo, el equivalente a un camión por minuto’.
Nuestro mar Mediterráneo, apunta, es uno de los 25 lugares más ricos en biodiversidad y, lamentablemente, también es la sexta zona de acumulación de residuos en el mundo.
Italia en particular registró 968 residuos cada 100 metros de playa, el 81 por ciento de ellos plásticos, considerado el material más peligroso si se dispersa en el medio ambiente, según datos de un último monitoreo de voluntarios de Legambiente.
Para el ente ambientalista, resta mucho trabajo para evitar que todos esos residuos lleguen al mar y a las playas, y señaló la importancia de laborar en la economía circular, en nuevas leyes que reduzcan este problema desde el principio y también cambien estilos de vida.
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