Personal del Instituto de Medicina Legal, en coordinación con la Fiscalía General de la República, ya levantó 10 de los cuerpos localizados en la casa del expolicía Hugo Osorio, conocido ya como el ‘Psicópata de Chalchuapa’.
Osorio fue capturado en flagrancia el pasado 8 de mayo, tras asesinar a una madre y su hija, cuyos gritos alarmaron a vecinos que avisaron a la Policía Nacional Civil.
Al inspeccionar la vivienda fueron encontrados dos cadáveres cerca de una fosa séptica, y poco a poco los peritos descubrieron al menos 14 cuerpos más, muchos de los cuales parecen ser personas reportadas como desaparecidas.
La mayoría de las víctimas son mujeres, pero también hay menores de edad, un descubrimiento que generó terror y preocupación en Chalchuapa, localidad de interés turístico por sus pirámides y ruinas mayas.
De hecho, la casa donde laboran los forenses está en el callejón Estévez, a pocos metros del reconocido sitio arqueológico Tazumal y de un monumento dedicado al revolucionario cubanoargentino Ernesto Che Guevara.
Varios vecinos del lugar mantienen sus puertas y ventanas cerradas, por el golpe a la confianza que representó la noticia de un asesino en serie viviendo en la misma colonia, y con un pasado como policía.
A su vez, personas que buscan un cierre para sus familiares desparecidos esperan alguna nueva pista, aunque sea la dura confirmación de la muerte.
Hasta el momento hay confirmación de 17 asesinatos perpetrados en la casa de Osorio, quien solo ha sido acusado de entrada por el doble feminicidio que condujo a su arresto.
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