Por medio de un comunicado difundido por la oficina de su portavoz, el titular lamentó la pérdida de vidas y los daños causados por la actividad volcánica, cerca de la localidad de Goma, en ese país africano.
Guterres manifestó preocupación porque este desastre se produce en un momento de grandes necesidades humanitarias en la región, alimentadas por la inseguridad y exacerbadas por la pandemia de Covid-19 y sus repercusiones sanitarias y socioeconómicas.
La ONU y sus socios humanitarios trabajan para apoyar los esfuerzos del Gobierno del Congo democrático con el fin de ayudar a los afectados por la erupción del volcán Nyiragongo, informó.
También la Misión de Estabilización de las Naciones Unidas en la República Democrática del Congo (Monusco) moviliza sus activos aéreos con el objetivo de monitorear la situación y asegurar que la población esté informada de los acontecimientos recientes.
Autoridades de la República Democrática del Congo confirmaron este lunes la muerte de al menos 20 personas tras la erupción del volcán Nyiragongo, mientras prosiguen el análisis de daños humanos y materiales.
Esta mañana, en la nororiental zona de Kibati, fueron encontrados otros cinco fallecidos por las emanaciones tóxicas de la lava, lo que elevó a 20 el número de víctimas mortales, según informó el Gobierno provincial en Kivu del Norte.
Helicópteros de la Monusco efectúan vuelos de reconocimiento sobre el cráter, pues todavía hay temblores de tierra perceptibles en las cercanías del monte Nyiragongo.
El portavoz del Gobierno en Kivu del Norte, Patrick Muyaya, corroboró la existencia de numerosos heridos, aunque todavía sin cifras exactas del número de lesionados, ni de los estragos en infraestructuras de los 17 asentamientos o pueblos damnificados.
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