El coronel Abass Dembele, gobernador de la demarcación, comunicó a medios de prensa locales que las víctimas, un cura cristiano y cuatro de sus fieles, resultaron raptados cuando se desplazaban de la localidad de Segou a la zona de San, donde participarían en una misa.
Los religiosos ahora liberados se encuentran bien y se reunirán pronto con sus familiares, precisó la fuente.
Fuentes eclesiásticas indicaron, por su parte, que los presuntos delincuentes soltaron a los capturados luego de que el automóvil en que viajaban sufrió una avería en las cercanías de la frontera con Burkina Faso y representantes comunitarios los contactaron.
En Mali, como otros países del Sahel, son frecuentes los secuestros de civiles y ataques armados de grupos radicales afiliados al Estado Islámico y a la red Al-Qaeda, los cuales fomentan un clima de violencia y provocan muertes y desplazamientos de personas.
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