Condenado por 28 homicidios, torturas y disímiles abusos, purgaba una prisión de 25 años, en los últimos tiempos en domicilio.
Entre los crímenes por los que fue sentenciado se encuentra el secuestro y muerte del maestro y periodista Julio Castro cuyos restos fueron hallados tras el retorno de la democracia en el predio del Batallón 14 del Ejército.
En una Corte Militar de Honor en 2018, confesó que en 1972 mató e hizo desaparecer al joven tupamaro Roberto Gomensoro, cuyo cuerpo arrojó al Río Negro, atado con piedras para que no fuera encontrado.
Durante la dictadura participó en el Organismo de Operaciones Antisubversivas (OCOA), en la represión al Partido Comunista y en Buenos Aires donde muchos testigos los sindican como participante del secuestro, tortura y asesinato de los legisladores Zelmar Michelini y Héctor Gutiérrez Ruiz en 1976.
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