El presidente Andrés Manuel López Obrador dedicó su conferencia de prensa matutina de este lunes al dramático tema de la violencia de género, uno de los mayores problemas que enfrenta el país y que, a pesar de todos los esfuerzos realizados por el actual gobierno, no ha sido resuelto.
En la conferencia rindieron informe, además de Rosa Icela Rodríguez, secretaria de Seguridad, Olga Sánchez Cordero, titular de Gobernación, y representantes de oficinas estatales que atienden los diversos aspectos que afectan a la mujer mexicana, como la discriminación laboral, el acoso sexual e incluso violencia familiar.
La titular de Seguridad dijo que ocho estados concentran las tasas más altas de feminicidios por cada 100 mil mujeres. Son ellos Morelos, Sonora, Quintana Roo, Colima, Jalisco, Sinaloa, San Luis Potosí y Chiapas.
Sin embargo, no se dieron cifras de la cantidad de asesinatos en esos lugares ni del total acumulado, aunque la secretaria Olga Sánchez señaló que es un mal que se arrastra desde la última década del siglo pasado y se ha incrementado en este.
Todas las participantes coincidieron que se ha registrado un incremento de feminicidios durante la pandemia, y que estudian muy a fondo las causas y acciones para enfrentar el problema de la forma más efectiva con programas territoriales desde las diversas instancias gubernamentales.
Sánchez dijo que la estrategia de prevención y atención a las mujeres para lograr el acceso a una vida sin violencia es una prioridad del gobierno federal y los estatales.
Siguiendo el tema del incremento de los feminicidios, Icela Rodríguez admitió que el aumento de los homicidios de mujeres se registró desde 2018 y creció en 2019 cuando se unificaron criterios penales y se reforzó un registro nacional para homologar las causales del homicidio en los 32 estados.
De acuerdo con cifras presentadas por Rodríguez, de los 724 municipios que registran carpetas por feminicidios, 50 concentran el 38,5 de los casos y otros cinco el 7,9 entre los cuales figuran Culiacán, Tijuana, Juárez, Guadalajara y Monterrey.
El presidente López Obrador aceptó que hay un incremento del feminicidio en el país y que su gobierno no está de espaldas a esa realidad, sino que trabaja todos los días para definir y eliminar las causas que lo generan.
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