Durante su intervención en el 18 Foro Parlamentario de Inteligencia y Seguridad, que sesiona hasta mañana en la sede permanente del Parlamento Latinoamericano y Caribeño (Parlatino), el titular precisó que esta actividad es fuente de financiamiento para más de 50 áreas de negocios ilícitos.
Entre las que más ganancias aportan enumeró los medicamentos y productos electrónicos falsificados; prostitución, tráfico y trata de personas; marihuana; apuestas ilegales; cocaína; venta ilegal de medicinas que requieren receta médica; heroína; piratería de software y contrabando de cigarrillos.
Pino expresó que la dinámica mundial demuestra que aún en medio de la pandemia de la Covid-19, las organizaciones criminales mantienen su accionar a través de nuevas modalidades que atentan contra la economía, el desarrollo, la seguridad, la paz y la democracia de las naciones.
Destacó que mientras los países de la región luchan contra esta enfermedad y los problemas económicos generados por ella, el crimen organizado expande sus operaciones, especialmente en áreas como el narcotráfico, ciberdelito, lavado de capitales, trata de personas y computación cuántica, entre otras.
Al respecto, precisó que estos problemas van en detrimento de la calidad de vida de los individuos, por los daños colaterales asociados a la violencia que provocan la muerte de inocentes en algunas ocasiones.
En ese sentido, el director regional de Crime Stopper, Alejo Campos, afirmó que ‘el crimen organizado, transnacional y global, tiene amenazado el desarrollo integral de las personas en el mundo y especialmente en América Latina y el Caribe’.
Destacó la recién aprobada ley modelo del Parlatino contra el comercio ilícito y el crimen transnacional, la cual constituye un referente para los congresos y asambleas nacionales de los 23 países miembros del organismo legislativo regional.
Por su parte, el presidente del Parlatino, el senador chileno Jorge Pizarro, aseveró que ‘la seguridad ciudadana no se trata solamente de la reducción de los delitos, a nosotros nos parece fundamental que podamos desarrollar políticas públicas permanentes que busquen actuar en la prevención de los actos ilícitos’.
Sobre el tema, el diputado Marcos Castillero, presidente de la Asamblea Nacional de Panamá, dijo que los parlamentos juegan un papel fundamental en la elaboración de normas que fortalezcan la seguridad cibernética del comercio, castigue el blanqueo de dinero y toda la amplia gama de actividad ilícita que desarrolla la delincuencia transnacional.
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