En Bogotá, Medellín, Cali, Barranquilla y otras ciudades colombianas miles de personas, por medio de diferentes expresiones culturales, exigieron el cese de las agresiones contra este sector poblacional.
De acuerdo con Marcela Sánchez, directora de la fundación Colombia Diversa, el país, pese a los avances en materia de derechos para las personas LGBTIQ+, contabilizaba 110 homicidios por año.
Aseguró que aquí se asesinan a más ‘gays’ que sindicalistas o periodistas y hay un alto subregistro en este tipo de hechos.
‘El Estado no le pone la lupa. Hay que prevenir la violencia. Cualquier tipo de violencia’, enfatizó en una entrevista publicada en el diario Las Dos Orillas.
Colombia es unas de las naciones del hemisferio occidental con las políticas más abiertas al permitir que los homosexuales se casen, adopten e ingresen a las fuerzas armadas abiertamente.
En noviembre de 2015, la Corte Constitucional de Colombia aprobó la adopción homosexual y en abril de 2016 aprobó también el matrimonio entre personas del mismo sexo.
Sin embargo, con frecuencia salen a la luz las denuncias relacionadas con la violación de los derechos de estas personas.
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