‘He tomado la decisión de volver a la política polaca’, explicó Tusk este domingo en rueda de prensa en la que explicó que el relevo al frente de la formación europea, la mayor de la Eurocámara, comenzará en los próximos meses.
Las declaraciones del ex primer ministro de 64 años de edad se producen un día después que el mayor partido de la oposición: Plataforma Cívica, lo eligiera por unanimidad como su nuevo líder.
Aunque oficialmente fue escogido como vicepresidente, Tusk se encargará de la presidencia después de la renuncia de Borys Budka, quien tras un año al mando dio un paso al costado para beneficiarlo.
Tusk ganó las elecciones en 2007 y 2011. En 2014 abandonó la política nacional para presidir el Consejo Europeo. Ahora se ve como una esperanza para derrotar al debilitado Partido Ley y Justicia (PiS), que gobierna desde 2015.
La acción del sábado constituyó el desenlace de meses de rumores sobre un retorno del ex primer ministro desde que anunció que no se quedaría a ver por la televisión como la vida política era dominada por el PiS.
En las recientes semanas Tusk se reunió con figuras prominentes de la Plataforma, incluido el alcalde de Varsovia, Rafal Trzaskowski, quien se barajaba para sustituir a Budka en la dirección de la formación.
‘El mal reina hoy en Polonia, donde el PiS ha librado batallas contra la Unión Europea, contra Alemania y contra la República Checa y ha alienado al país de la actual administración estadounidense tras realizar una estupidez de inversión política en el expresidente (de Estados Unidos) Donald Trump’, expuso Tusk citado por la agencia de noticias PAP.
Encuestas recientes para las elecciones de 2023 sitúan a la Plataforma Cívica (16,9 por ciento) como la tercera en intenciones de voto detrás del gobernante partido nacionalista (34) y de la formación de centro Polonia 2050 (17,1).
Analistas y diversos medios de prensa especulan que los comicios podrían adelantarse para evitar una posible moción de censura en el parlamento contra el primer ministro, Mateusz Morawiecki, quien podría convertirse este domingo en el vicepresidente del PiS.
En un congreso, que terminará hoy, unos mil 500 delegados ratificaron en la presidencia del Partido Ley y Justicia al vicemandatario Jaroslaw Kaczynski, quien es considerado el mayor decisor en la política del gobierno.
Kaczynski, al frente de la formación desde 2003, recientemente expresó a la Gaceta de Polonia su animadversión por Tusk: ‘Por lo que yo sé, su posición, por decirlo de manera muy suave, no está muy arraigada. Y ya sabemos que su falta de pasión por el trabajo duro, así como su germanocentrismo no son del gusto de todos’.
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