En reacción a la medida, la firma extranjera anunció que explorará ‘las opciones legales’ para maximizar el valor para sus accionistas en ese yacimiento.
Rocío Nahle, secretaria de Energía, notificó al director de Pemex y al representante legal de Talos la decisión de designar a la empresas local como el operador del proyecto Zama, el mayor hallazgo de crudo en décadas hecho por empresas privadas en el país.
Nahle citó un estudio realizado para evaluar las capacidades técnicas y de ejecución de la sección Pemex Exploración y Producción (PEP) y Talos en proyectos de aguas someras similares a Zama.
El estudio concluyó que Pemex presenta condiciones y características técnicas, así como de ejecución favorables que garantizan el desarrollo del campo en el corto plazo, en condiciones de factibilidad técnica.
También mencionó que el director general de la sección PEP Ángel Cid Murguía, comunicó a la Secretaría de Energía que Pemex posee la suficiente capacidad financiera para desarrollar este proyecto, contando incluso con el respaldo de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público.
Pemex argumentó en mayo pasado, en un documento enviado a la Comisión del Mercado de Valores de Estados Unidos que posee 50,4 por ciento de las reservas de Zama, mientras que el consorcio Talos, integrado también por la alemana Wintershall Dea y la británica Harbour Energy, el 49.57 por ciento.
La estadunidense Talos confirmó ayer haber recibido la notificación el pasado 2 de julio y se dijo muy decepcionada con la repentina decisión de la Secretaría de Energía de concederle a Pemex la operación de Zama, con reservas recuperables de casi 700 millones de barriles de petróleo.
Aseguró que explorará todas las opciones legales y estratégicas para maximizar el valor para sus accionistas en el yacimiento.
Agrega que Talos ya ha comprometido más de 100 millones de dólares para el proyecto, y se espera cueste más de 700 millones de dólares, según datos de la Comisión Nacional de Hidrocarburos.
Ambos han estado inmersos por meses en un largo proceso de unificación del yacimiento. Al no llegar a un acuerdo a finales de marzo tras un periodo de negociación extendido, quedó en manos de la Secretaría de Energía decidir al operador del proyecto conjunto.
Contra viento y marea, el gobierno ha decidido reflotar a Pemex, tras el destrozo que los gobiernos neoliberales hicieron de la ahora empresa productiva del Estado, señaló Nahle.
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