Científicos de la Universidad de Cardiff, Reino Unido, señalaron que ese medicamento cuenta con mecanismos biológicos que contribuyen a disminuir la mortalidad y detener la propagación de la enfermedad, citados en un artículo publicado por la revista Ecancer Medical Science.
Explicaron que el analgésico común incidió en pacientes con cáncer de colon, mama y próstata, mientras recordaban su consumo por millones de personas en el mundo para protegerse contra los ataques cardiacos y accidentes cerebrovasculares, porque adelgaza la sangre.
Peter Elwood, científico honorario de la universidad británica y con más de 50 años de experiencias en el estudio de los efectos de la aspirina, declaró que la investigación sugiere que no sólo ayuda a reducir el riesgo de muerte, sino también demostró una disminución de la llamada diseminación metastásica.
Elwood sostuvo que ‘parece merecer una consideración seria como tratamiento adyuvante del cáncer’.
Tras consultar a los autores de los estudios individuales considerados en la revisión sobre los riesgos de tomar aspirina, los investigadores encontraron que mientras un pequeño número de pacientes experimentaron una hemorragia, no había evidencia de ningún exceso de muertes atribuibles al sangrado, continúo el artículo.
Con más de mil ensayos clínicos divulgados cada año, Elwood alentó más investigación en el uso de aspirina e instó a centrarse en cánceres menos comunes.
mgt/nmr