La investigación desarrollada en la Facultad de Medicina de la Universidad de Yale, Estados Unidos, plantea la posibilidad de crear fármacos que promuevan el recableado sináptico, pero sin causar las alteraciones en la conciencia que genera este tipo de drogas psicodélicas.
Los especialistas explicaron que hasta el momento solo se probó en ratones de laboratorio, los cuales recibieron una sola dosis con efecto a las 24 horas y una durabilidad de un mes.
Estos mejoraron su desempeño en una prueba de comportamiento relacionada con el estrés.
Los científicos descubrieron ‘no solo un aumento del 10 por ciento de conexiones neuronales, sino que hallaron que eran un 10 por ciento más grandes y más fuertes’, puntualiza el artículo aparecido en la revista Neuron.
En tal sentido, los expertos sugieren continuar las investigaciones para saber cómo evitar sus efectos alucinógenos, y obtener solo resultados favorables.
La psilocibina es un compuesto químico presente en algunos hongos alucinógenos secos o frescos, y pueden ser encontrados en México, América del Sur y partes del sur y noroeste de Estados Unidos.
Tiene una estructura similar a la dietilamida del ácido lisérgico, y sus efectos se generan gracias a su acción sobre los receptores de serotonina del sistema nervioso central.
Existen en el mundo más de 180 hongos que contienen psilocibina, un compuesto que también puede producirse sintéticamente en un laboratorio.
rgh/joe