En su totalidad los migrantes ilegales provienen de estados subsaharianos, los cuales serán puestos a disposición de la Gendarmería para los procedimientos del caso, lo que significa que serán devueltos a sus países de origen, señala un comunicado oficial difundido por la prensa local.
En una información paralela las fuentes oficiales señalaron que ‘la operación de rescate es parte de los esfuerzos del reino para luchar contra la migración irregular y la trata de seres humanos’ y añaden que en los últimos cuatro años los servicios de seguridad de reino alauita desmantelaron más de cinco mil redes de traficantes de personas.
Las precarias condiciones de las naves en las cuales se realiza la travesía causaron gran cantidad de naufragios, que convirtieron al mar Mediterráneo en un cementerio para decenas de miles de personas en los últimos años.
El tráfico de personas entre África y Europa cobró especial auge tras la agresión militar de la OTAN que derrocó al Gobierno de Libia después de apresar, torturar, vejar y asesinar al líder Muamar Ghadafi, quien no tenía cargo oficial.
La situación caótica provocada por el derrumbe del gobierno constitucional de Libia propició que milicias armadas controlaran porciones de territorio de ese país y emprendieran el lucrativo negocio del contrabando hacia costas europeas de seres humanos, a los cuales se les cobraban grandes sumas de dinero.
Los candidatos a migrar que no pudieran pagar el servicio fueron sometidos a trabajo como esclavos, según informes de agencias internacionales.
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