En su conferencia de prensa matutina en el Palacio Nacional, agrupó en cuatro segmentos las personas que serán beneficiadas con la medida, la cual debe entrar en ejecución en un plazo no mayor al 15 de octubre próximo.
Los casos beneficiados con el decreto que firmará en estos días son, en primer término, aquellos reos que lleven más de 10 años sin ser sentenciados y no hayan cometido hechos graves de sangre, una población penal estimada en más de 12 mil confinados, explicó.
El segundo segmento es el conformado por adultos mayores de 65 años encerrados por delitos del fuero federal que no hayan cometidos hechos graves. El tercero, también mayores de esa misma edad con enfermedades crónicas y con la misma condición de que su falta no los convierta en un peligro para la sociedad.
Quienes están en la cuarta acción son aquellos en los que se compruebe de manera fehaciente que fueron torturados para arrancarles confesiones y en realidad no hayan cometido los delitos graves que se les imputa.
En los cuatro casos aplicarán procedimientos simplificados en los que participarán las secretaría y entidades correspondientes como la de Salud en lo referente a los enfermos, la de Gobernación en cuanto a torturados, y así cada segmento, a fin de que se hagan los diagnósticos correspondientes.
Insistió en que el decreto será firmado en los próximos días y también lo publicarán rápido en el Diario Oficial a fin de que se cumpla el plazo señalado de iniciar el proceso antes del 15 de octubre de este año.
Dijo es importante tomar en cuenta de que hay muchos detenidos, demasiado reclusos, internos, que no tienen sentencia, y no solo del fuero federal sino también del común que son la mayoría pues suman 82 mil 189.
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