El gobierno mexicano, en su condición de presidente pro tempore de la entidad, está representado por el subsecretario de Gobernación Alejandro Encinas, quien de conjunto con la Secretaría de Relaciones Exteriores y el Instituto Nacional de Migración, coordina la reunión de Puebla.
En el cónclave las 11 delegaciones promueven un espacio para el diálogo político y técnico con el objetivo de compartir información, experiencias y buenas prácticas en materia migratoria, indicaron voceros de la subsecretaría.
Durante los dos días de actividades, los grupos de trabajo sobre Migración Irregular; Migración Laboral; Protección; y, Gestión Fronteriza, presentaron ya ante el pleno sus respectivos informes sobre las acciones más relevantes realizadas durante el primer semestre del año.
Este viernes continuará el debate sobre esos temas y al final del encuentro se hará una relatoría con las conclusiones a las que llegaron los delegados.
Asimismo, representantes de varios organismos como la Organización Internacional para las Migraciones, la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito, y la Comisión Económica para América Latina y el Caribe, así como de la sociedad civil, abordará en esta última jornada temas relacionados con la trata de personas y el Pacto Mundial para una Migración Segura, Ordenada y Regular.
El encuentro debe terminar con la creación de espacios para el análisis de la migración irregular extrarregional, los retornos asistidos de migrantes y el intercambio de información financiera para la identificación redes de tráfico y trata de personas en la región, indicaron los voceros.
Con la celebración de esta reunión, el gobierno de México, además de cumplir con su plan de acciones como Presidencia Pro-Témpore, reafirma su liderazgo de actor relevante y reitera su compromiso por impulsar mecanismos para fortalecer la gobernanza migratoria en la región, reiteraron las autoridades.
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