Entre los detenidos se encuentra un ciudadano acusado de tráfico de personas y seis indocumentados de procedencia pakistaní.
La redada ocurrió tras declaraciones del ministro de Relaciones Exteriores turco, Mevlut Cavusoglu, la víspera, en las que advirtió que su país no acogerá una nueva ola migratoria procedente de Afganistán.
Hemos cumplido con nuestras responsabilidades morales y humanitarias en relación con la migración, aseguró aquí el canciller de este país euroasiático en rueda de prensa tras una reunión con su homólogo alemán, Heiko Maas, en la ciudad de Anatolia.
Turquía alberga a unos cuatro millones de refugiados e implementó nuevas medidas de seguridad en sus fronteras para prevenir el flujo de migrantes.
Este país es una puerta de entrada a Europa para quienes, de forma irregular, escapan del hambre, la miseria o las guerras en sus naciones de origen.
Tras la toma del poder por los talibanes en Afganistán miles de habitantes de esa nación huyeron hacia otros territorios pese a promesas de los insurgentes sobre el respeto a los civiles y las misiones diplomáticas.
mem/ehl