Según indicó, en breve viajará a Riad, capital de Arabia Saudita, para reunirse con el presidente Abd Rabbuh Mansur al-Hadi y otros miembros del Gobierno yemenita.
También espera sostener encuentros con los líderes hutíes de Ansar Allah y otros grupos que enfrentan a las tropas gubernamentales, apuntó.
Para definir el mejor camino a seguir de cara al proceso de paz, Grundberg tiene la intención de evaluar los esfuerzos pasados, identificar qué funcionó y qué no, y escuchar a tantos hombres y mujeres de Yemen como sea posible, expresó.
Ese rumbo a seguir debe guiarse por las aspiraciones del pueblo de esa nación, recalcó en sus declaraciones en el Consejo de Seguridad.
Los civiles son los más afectados por el conflicto en Yemen, que diezma completamente la economía y dispara las necesidades, incluido el riesgo de una hambruna masiva, según advirtió el secretario general adjunto de Naciones Unidas para Asuntos Humanitarios, Martin Griffiths, el mes pasado.
De acuerdo con datos de ONU, más de 20 millones de personas en ese país necesitan asistencia y protección, lo cual es aproximadamente dos tercios de la población.
Yemen padece una de las más largas crisis humanitarias del mundo debido, en gran medida, al conflicto que enfrenta a tropas gubernamentales con rebeldes hutíes. La crisis escaló en 2015 con el comienzo de bombardeos de una coalición anti insurgente liderada por Arabia Saudita.
ga/ifb