Su autor, el escultor Pedro Reyes, ofreció un avance de la obra en un video en redes en la que, por vez primera, se ofrecen imágenes de la estatua, realmente hermosa y elogiada por la escritora Beatriz Gutiérrez Müller, esposa del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Con la colocación de la nueva escultura -para lo cual aun no hay fecha precisa- se pone fin en ese céntrico lugar de la capital, a 100 años de pleitesía, tiempo que llevaba allí su estatua, al navegante genovés quien trazó el camino a los conquistadores que masacraron a los pueblos originarios de esta parte del mundo.
Y con la de Tatli se reconoce la heroicidad de la resistencia y el rechazo a los colonialistas que robaron las riquezas de la nación e impusieron por la fuerza sus costumbres, como denuncia el gobierno mexicano.
El autor de la obra dijo que está inspirada en las famosas cabezas olmecas y otros muchos elementos de la cultura indígena, y escultores y artesanos trabajan en ella desde tres talleres que se encuentran en pueblos originarios de la capital.
Tlali, que en náhuatl significa Tierra, explicó, es el nombre de la escultura lo cual responde a la idea de que el monumento sea una alegoría a la pacha mama por ello está inspirada en muchos elementos de la escultura mexicana desde diferentes momentos de la historia y su gran antigüedad.
Sobre todo, añadió Reyes, a las famosas cabezas olmecas, que son la expresión más antigua de la escultura en México.
Contó que cuando le fue encomendada la misión buscó hacer la cabeza olmeca, y el mayor reto que tuvo fue cambiarla de género. Cuando esté concluida, Tlali tendrá aproximadamente nueve metros y medio de altura, ya que medirá seis metros y medio en la cabeza y de basamento dos y medio.
Aunque aún no hay una fecha exacta de entrega, Reyes dijo que la posible inauguración podría ocurrir el 21 de febrero de 2022, Día Nacional de las Lenguas Indígenas.
Detalló que está hecha de piedra volcánica, de la misma materia que emergió del Xitle o del Popocatépetl y que fue utilizada en la construcción y arquitectura de los pueblos originarios.
Explicó que para representar a la tierra se suele usar a una mujer, pero en el mundo prehispánico todas las deidades tienen una dualidad: tlaltezihuatl es ella y Tlaltecuhtli es él. Recordó que la cabeza olmeca es una aportación única pues no es algo que pertenece a un cuerpo, es una entidad en sí misma.
mem/lma