Tal comportamiento fue provocado por problemas logísticos derivados de las protestas contra el Gobierno, con cifras muy inferiores a las registradas en agosto de 2020, cuando la cosecha alcanzó 1,09 millones de bolsas.
Entre finales de abril y comienzos de junio, Colombia -el primer productor mundial de arábigo lavado- enfrentó una ola de protestas sociales y bloqueos de carreteras que impidieron la transportación de los embarques del grano hacia los puertos marítimos, desde donde se exportan.
‘El comportamiento observado en la producción se debe principalmente a los problemas logísticos en la exportación del café, producto de la situación de orden público en mayo y junio’, dijo un comunicado de la Federación de Cafeteros.
Las exportaciones de café en agosto desde el país sudamericano permanecieron estables en 1,13 millones de sacos de 60 kilos, con respecto al mismo mes del año previo.
De acuerdo con las estadísticas, entre enero y agosto la producción del grano cayó un ocho por ciento, a 7,84 millones de costales en comparación con igual periodo de 2020, mientras que las exportaciones avanzaron uno por ciento, a 8,06 millones de bolsas.
Colombia tiene cultivadas unas 855 mil hectáreas con cafetales y alrededor de 500 mil familias dependen de esa actividad.
Es el tercer productor mundial de este producto, detrás de Brasil y Vietnam, en tanto cosechó 13,9 millones de sacos en 2020 y sus exportaciones totalizaron 12,5 millones de fardos.
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