‘Me siento honrada de empezar a trabajar en la Unctad en un momento crítico para nuestro mundo’, dijo Grynspan quien inició su mandato de cuatro años tras ser aprobada por la Asamblea General en junio pasado.
Resaltó que la Covid-19 expuso las desigualdades y vulnerabilidades generalizadas del mundo y del modelo de desarrollo, por ello ‘mientras nos recuperamos de la pandemia, tenemos la oportunidad de reequilibrar la economía mundial, impulsar la resiliencia y garantizar la prosperidad compartida.’
‘Debemos actuar hoy para transformar el comercio y remodelar nuestra economía mundial para superar las barreras que impiden una mayor prosperidad para todos y emprender una senda de desarrollo sostenible que beneficie a todos’, destacó.
Adelantó que la XV Conferencia cuatrienal de la Unctad, prevista del 3 al 7 de octubre, será una importante oportunidad para que los países tomen decisiones audaces para abordar las enormes necesidades insatisfechas en materia de comercio, financiamiento, inversión y tecnología de los países en desarrollo que luchan para enfrentar la pandemia.
Antes de su nombramiento en la Unctad Grynspan fue secretaria general iberoamericana, siendo también la primera mujer en dirigir esta organización.
También fue secretaria general adjunta de la ONU y administradora asociada del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, y ex directora regional para América Latina y el Caribe de la organización.
Antes de incorporarse a la ONU, fue vicepresidenta de Costa Rica de 1994 a 1998, titular de Vivienda, ministra coordinadora de Asuntos Económicos y Sociales y viceministra de Hacienda.
Además, fue miembro del Grupo de Alto Nivel para la Financiación del Desarrollo.
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