‘Bolsonaro sabía que no iba a entrar en un restaurante (en la ciudad estadounidense) por esto y salió a la calle a lucirse, mientras parte del pueblo brasileño pasa hambre’, escribió Hoffmann en la red social Twitter.
La diputada calificó además ese flagelo de gran vergüenza para Brasil, un país productor de alimentos.
Consideró asimismo que no resulta una vejación comer pizza en la calle, como lo hizo el exmilitar en la urbe estimada la más icónica del mundo, sino que ‘un presidente de un país no se vacune’.
Según un informe del conglomerado comunicacional británico BBC, Bolsonaro es el único de los 19 líderes del G20 (compuesto por las 19 principales economías más la Unión Europea) presente en la asamblea de la ONU sin inocularse contra el patógeno.
El viernes pasado, el reconocido escritor brasileño Paulo Coelho pidió al secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, que impida la entrada al organismo de la comitiva que encabeza Bolsonaro.
Mensajero de la paz de la ONU, Coelho hizo tal reclamo en un mensaje dirigido a Guterres en el cual afirmó que los miembros no vacunados antiCovid-19 de la delegación brasileña son un ‘mal ejemplo’.
‘Secretario general Antonio Guterres, sé que no puede impedir la entrada de los mandatarios, pero sería una victoria prohibir la entrada de la comitiva del presidente brasileño’, posteó el autor de El Alquimista en redes sociales y etiquetó el perfil de Guterres.
Las declaraciones de Coelho emergieron tras el anuncio de que la ONU no exigirá pruebas de vacunación a los funcionarios que asistan a la reunión.
El Gobierno de Brasil ratificó que Bolsonaro liderará la comitiva del 19 al 21 de septiembre, pero por lo visto no estará del 21 al 27 de septiembre, cuando transcurra la semana de alto nivel.
De acuerdo con el texto, ‘como cada año, Brasil será el primer país en intervenir en el debate general de la Asamblea General, el 21 de septiembre’.
Refiere que la cita tendrá como tema principal ‘Fomentar la resiliencia a través de la esperanza: recuperarse de la Covid-19, reconstruir de forma sostenible, responder a las necesidades del planeta, respetar los derechos de las personas y revitalizar las Naciones Unidas’.
Pese a los avisos de las autoridades estadounidenses, Bolsonaro, quien minimiza la gravedad de la enfermedad, viajó al país del norte sin inocularse contra el virus.
El excapitán del Ejército comunicó que en su arenga en la ONU presentará mañana ‘las verdades’ del gigante suramericano.
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