De acuerdo con Indepaz, además de estos crímenes, durante este año fueron cometidas 71 masacres en el país suramericano.
Por otro lado, el pasado lunes, Colombia volvió a ocupar el primer lugar en el mundo -por segundo año consecutivo- en número de líderes ambientales asesinados, según datos del informe anual de la organización no gubernamental Global Witness.
El colectivo británico refiere que en 2020 fueron asesinadas 65 personas defensoras del medio ambiente y la mayoría de esos ataques fueron cometidos contra indígenas, afrodescendientes y contra pequeños agricultores.
El informe de la ong señala que muchos gobiernos ‘no están protegiendo a los defensores ambientales: en muchos casos perpetran violencia contra ellos directamente y en otros podrían ser cómplices de empresas interesadas en silenciar a activistas’.
Global Witness recalcó que, mientras muchos sectores acogieron con satisfacción la ratificación del Acuerdo de Escazú –un tratado histórico sobre la protección de personas defensoras en América Latina y el Caribe–, la violencia contra ellas continuó.
En Colombia aún está pendiente la ratificación en el Congreso de este primer tratado ambiental regional vinculante y el primero en el mundo que incluye disposiciones sobre los defensores ambientales.
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