Acerca de este ‘sueño de paz con justicia social’ resaltó que el propósito general del Acuerdo alcanzado luego de cuatro años de diálogos y negociaciones en La Habana, Cuba, ‘es erradicar definitivamente la violencia política y atender a las víctimas del conflicto armado’.
Un propósito por el que decididamente luchamos, enfatizó el excombatiente por medio de su cuenta en Twitter.
Desafortunadamente, el cumplimiento del Estado no ha sido el que esperábamos porque mientras los excombatientes de las FARC-EP cumplen íntegramente lo pactado, 285 firmantes de paz fueron asesinados ‘en medio de una evidente impunidad’, remarcó.
Por otra parte, expresó que, aunque no hay avances en la Reforma Rural Integral ni en la Sustitución de Cultivos de Uso Ilícito y la reincorporación comunitaria está desfinanciada, Comunes nacido como partido de las FARC-EP, no cesará ‘en la lucha por implementar integralmente el Acuerdo de Paz’.
Ese es nuestro mayor anhelo, subrayó el dirigente político, quien agregó que, a pesar de las dificultades, ‘la paz no tiene vuelta atrás’.
‘Así lo demuestra la existencia de nuestro partido político, la puesta en marcha del Sistema Integral de Verdad, Justicia, Reparación y No Repetición; además de las curules de Paz’, puntualizó.
Aseguró que también es momento para ratificar a las víctimas el más profundo compromiso de esta fuerza política con su dolor y los padecimientos sufridos por causa del conflicto armado.
‘Guardamos la esperanza de que algún día puedan perdonarnos. Siempre estaremos prestos a trabajar por atender sus demandas’, agregó.
‘A cinco años de firmado el Acuerdo de Paz en Cartagena lo digo nuevamente y con total seguridad: áColombia, cuenten siempre con nosotros para la paz y nunca jamás para la guerra!’, concluyó.
El lunes 26 de septiembre de 2016, en la plaza de Banderas del Centro de Convenciones Gonzalo Jiménez de Quesada, en Cartagena de Indias, unos 10 presidentes de países vecinos, el rey emérito de España Juan Carlos y representantes de varios gobiernos y de la ONU presenciaron la firma del Acuerdo.
El expresidente Juan Manuel Santos, en representación del Estado; y Londoño, conocido en la guerra como Timochenko, por las FARC-EP, rubricaron el documento que puso fin al conflicto armado interno de Colombia iniciado en 1960.
Sin embargo, el Acuerdo debía refrendarse en un plebiscito cuyo resultado final fue una victoria para el No.
Tras un periodo de negociación con los promotores de la negativa el Gobierno y las FARC-EP acordaron un nuevo texto, que se firmó el 24 de noviembre en el teatro Colón, de Bogotá, ratificado por el Congreso bicameral el 29 y 30 de noviembre de ese mismo año.
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