Una proclama emitida al respecto apunta hacia la emergencia sanitaria por la pandemia en la que ‘nos matan, violan, excluyen y discriminan desde el solapado cotidiano, nos desaparecen, someten, explotan física y emocionalmente.’
En este sentido, Clyde Lacasa, una de las dirigentes de la Red Uruguaya contra la Violencia Doméstica y Sexual (Rucdvs), manifestó que ‘esto se tiene que frenar de alguna manera’ en dialogo con el semanario Caras y Caretas en su actual edición.
Según la activista, la Red conformada por más de 30 organizaciones de la sociedad civil trabaja desde hace 20 años en torno a esa problemática de forma conjunta con el Estado, e independiente de los gobiernos de turno, pero confiesa que queda mucho por avanzar.
Citó dos leyes adoptadas en 2002 y a finales de 2017, que si bien está vigente, no se cumple en su totalidad, reconoce diferentes tipos de violencias, entre otras psicológica, sexual, patrimonial, pero ‘no hay juzgados especializados para darles tratamiento’.
El pasado 13 de setiembre, la Red emitió un comunicado, dirigido al presidente de la nación, Luis Lacalle Pou, en el cual denunció el deterioro del servicio policial que se brinda a las víctimas sobrevivientes que va desde disuadirlas a que no recurran a la justicia hasta negarse a dar trámites a sus solicitudes.
Lacasa recordó que a fines del año 2019 hubo una declaración de Emergencia Nacional por las situaciones de violencia y que, sin embargo, no se tomó ningún recaudo por parte del gobierno que asumió en marzo del 2020 y ‘ante el asesinato de cada mujer el Estado es responsable por no hacer lo que se debe’.
También enfatizó en tratar estas situaciones desde una perspectiva cultural a partir de la escuela para erradicar el concepto inculcado de que ‘las mujeres somos responsables de toda la acción familiar o la idea de que la violencia siempre existió y que debe mantenerse dentro del hogar’.
Para la entrevistada ‘cuando esto se convierta en un política pública podremos avanzar’.
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